miércoles, 5 de octubre de 2011

¿Estado de bienestar' ¿Para cuántos?

Todas las portadas de los periódicos digitales devuelven la imagen de un país sumido en una profunda crisis en él que algunos listos se están poniendo las botas.
Noticias como "Descartar que España vaya a entrar en recesión, los recortes en las Comunidades Autónomas, el paro del sector educativo, la situación insostenible de la sanidad en Cataluña..." son totalmente contradictorias con "las indemnizaciones de los consejeros de NCG, con que TV3 se lleve 1.900 millones en subvenciones, que el Senado (por Dios, que desaparezca ya) se gaste un millón en ordenadores..."
La visión de que en qué gastar los maltrechos ingresos del Estado varía en función de cada uno. Para la generalidad es una verguenza que unas Cajas en quiebra y sostenidas con ingresos estatales puedan afrontar pagos de indemnizaciones pactadas. Entre los que pensamos eso, se encuentran el Gobierno y la Xunta, todos los partidos en general. Y en el caso de Galicia me parece sangrante que los mismos que reprueban a los consejeros de NCG y que "exigen" la devolución de las indemnizaciones, sean los mismos que aprobaron cobrar el plus de los altos cargos y tras años exigiendo que lo quiten, sea en lo único que no recortan. Se recorta en interinos, en Sanidad, en Educación, se mete mano a los liberados sindicales y se anuncian recortes en el parque movil y entre tanto recorte, ningún partido es capaz de secundar en el Parlamento gallego la iniciativa popular para que se acabe con este plus que afecta a unos cuantos políticos pero que supone una suma importante.
Para los políticos y ante la inminencia de las elecciones, el 20N, todos son promesas y soluciones. Los socialistas son más socialistas que nunca, atacarán a los ricos, a los mismos ricos a los que no controlaron en sus años de mandato y a los que permitieron que sus fortunas crecieran y crecieran. Porque no nos engañemos el dueño de Zara es más rico que antes de la crisis y el patrimonio de nuestros políticos no está nada mal. Los "otros" pues otro tanto de lo mismo, promesas y recortes.
La salida de la crisis no se ve cerca. La enorme bola generada por los intereses del endeudamiento comprometerá nuestro crecimiento y nuestro Estado de bienestar nunca volverá a ser el mismo. Todos pronostican recortes. Los escasos ingresos  no dan para tanto gasto y hay que priorizar.
Las alternativas son un tanto crueles, en la Sanidad Catalana o se recortan a la mitad las extras o se echa a un montón de interinos, gente que trabaja a tu lado y que necesita trabajar para vivir. Te quedas tú sin lo tuyo o le quitas el pan a otro.
Pero al final, España es un país de pícaros, de tonto el último, de salvese quien pueda, y los recortes en Sanidad o en Educación que padecemos la mayoría de los españoles, no importan a todos aquellos que tienen seguro privado e ingresos suficientes para costear la mejor educación para sus hijos al precio que sea. A los listos, estos recortes no les afectan y aunque incrementaran los impuestos a sus rentas, seguramente encontrarían reobecos legales para librarse de contribuir en lo que deberían.
¿Qué es mejor que paguen unos cuantos o que paguemos todos? Para el Estado está claro y al fin y al cabo la quiebra del Estado de bienestar sólo la sufrimos nosotros.